Pasteaur introdujo el caldo en el recipiente y dobló el cuello de este calentándolo. Seguidamente, puso el caldo a hervir hasta que entró en ebullición y después lo dejó enfriar. El cuello del recipiente se lleno de pequeño microbios por la gravedad, si el caldo estaba en vertical no tocaba los microbios pero si se inclinaba el caldo se mezclaba con estos pequeños microbios. De esta manera, Pasteur hizo ver que si el caldo no se llenaba de microbios era porque el aire no entraba cargado de microbios dentro de donde estaba el caldo. Con esto se demostró que la generación espontánea no era cierta, que los seres vivos provenían de otros seres vivos.
lunes, 21 de septiembre de 2015
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